Aquí empecé a desnudar mis sueños, y descubrí que con ellos, la realidad es mucho más soportable.
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jueves, 25 de noviembre de 2010

Cuando el olvido falla




Cuando el olvido falla


Milagritos tiene el pelo oscuro, largo y liso.
Todos se lo acarician.
Cada noche  mira por la ventana,
habla con el conejo que habita en la luna.
-si te fijas, lo puedes ver-.
Sueña con tener tirabuzones, zapatos cristal,
y con el principito ¨Gandúngas¨, que la recoge en helicóptero.


Le gusta masticar el ¨palo luz¨, y los caramelos ¨Cubalibre¨.
Adora los besos de coca cola, mandarina y chocolate
que mamá le da.
Le encanta las flores que empapelan la pared,se recrea en ellas.
Juega con las musarañas,y les pone nombre.
Le asusta un poco, tener que hacer la primera comunión.
Eso de comer el cuerpo de Cristo,
es como si la boca se le llenara de sangre.
Y sobretodo le asusta, tener que contar sus cosas,
a un señor con sotana (bueno,a un señor)
Eso, sólo lo hace con sus amigos los ¨bichitos-bola¨.


Una triste tarde, después de los payasos de la Tele,
alguien le robó la camisita a su muñeca vestida de azul.
Y también su canesú…
Ahora está desvestida.
Para ponerla a salvo, y que no coja frío,
la ha guardado en su cajita del olvido.


Cuando mamá no está, Milagritos no duerme.
Llora y tiembla, aprieta los dientes,
y las rodillas,
por si el robador del sueño vuelve a despertarla,
una vez más.


Un día lo recordó.
Todo.
la cajita, la camisita, el canesú...
Tardó 20 años,
entonces, ella ya tenía 26.
El robador del sueño murió,
ese mismo día.
Solo.
Sin una vida ni nada.
Milagritos no hizo la primera comunión.



Está bien.

E.©fthecloud

3 comentarios:

rodolfo dijo...

Dios que entrada tan desgarradora. Abrir la caja de los olvidos en bueno, aunque se tarde mucho, muchos años en entender "aquello"
He leido una vez algo así y me impactó tanto que aquella noche lloré
Ha sido un regalo leerte, como siempre, pero esta vez, ha sido especial
gracias
un beso

Ángel Iván dijo...

Ays y no es broma, que cuchillada he sentido al leerte.
Lástima de tijeras sin uso que hay en los costureros porque con gusto las usaría para cortar muchos apéndices de robadores de sueños, de esperanzas y de vidas.

Te echaba de menos.

Un beso fuerte y feliz fin de semana.

Anónimo dijo...

Impresionante historia Eva. La mente defendió a Milagritos, bloqueando el recuerdo, el aterrador recuerdo de un fatal episodio en su vida. Esa misma mente se ha encargado veinte años después de traer dicho recuerdo al plano consciente, para matar para siempre al robador del sueño.
Es una sensación extraña encontrar una poesía tan bella en un panorama tan desolador, una mezcla entre repulsión por una cosa y admiración por la otra.
Un abrazo.